Vergonzoso el comportamiento del gobierno valenciano. Digno de un sectarismo total. De subordinado de una cúpula tan poderosa que arrasa con lo que sea sin que se note. Ya sean árboles, trastorno a los ciudadanos, a los enfermos, etc. Eso sí, a la familia que no se la toque. ¿No fue Jesús el que se la montó a unos mercaderes por usureros o no sé qué? O eso fue una historia de Shakespeare. Lo que tampoco tiene nombre es la actitud de Iberia. Modificar un avión para que al curita este alemán lo saquen del pais. Con asiento de cuero blanco y bordado de oro incluido. Demasiadas finezas para una religión que castiga la homosexualidad, ¿no? Tampoco es que sean prototipo ellos de virilidad con esas mariconadas de necesidades. Lo que tiene que hacer el Vaticano, para que se le empiece a tomar en serio, es subvencionar estas salidas de tono. Y en cuanto a Iberia, que luego no cobren los billetes a precios abusivos, sigan con los retrasos en las salidas y las llegadas, y permitan a los pilotos hacer huelgas por doquier y te fastidien las vacaciones, el trabajo, o te fastidien a secas. Lo mejor que hicieron fue sacarlo del pais, sin duda. Pero por favor, que no vuelva. |
Hoy en día cualquier religión es inecesaria, caduca y molesta. La visita del Papa habrá llenado los bolsillos de unos pocos, y ha dejado claro el rídiculo de gran parte de la sociedad española.
Muy triste